La innovación que suma

Al ampliar una planta productiva se deben tener en cuenta multiplicidad de factores. Uno de ellos es el augmento de las aguas residuales que se produce. En algunos casos, éstas pueden presentar especificidades que hacen recomendable un pretratamiento previo a su puesta a disposición de la depuradora de la planta.

En este caso, del sector de la industria alimentaria, la ampliación de unidades productivas creaba una cierta cantidad de aguas residuales con un alto contenido en grasas, a diferencia de las aguas ya tratadas. Por este motivo se diseñó un sistema específico de pretratamiento completo.

Por un lado, con tal de no solidificar las grasas, se instala una bomba de calor para agua que mantiene en todo momento las cañerías a elevada temperatura. Esta innovación permite tratar las aguas residuales con mucha facilidad y evita problemas de atascos.

Un depósito enterrado dedicado con cubierta transitable recoge por un tiempo reducido las aguas específicas. Éste se dota de un suelo radiante que mantiene la temperatura necesaria.

A continuación se realiza un tratamiento físico-químico para separar las grasas. Éstas se derivan directamente al contenedor dónde solidifican a temperatura ambiente. El agua clarificada es enviada a la depuradora de la planta para su tratamiento.

El uso de una tecnología ya conocida en un nuevo campo permite resolver problemas específicos con el enfoque correcto. Para ello es necesario un pensamiento lateral y volcarse en los requisitos específicos de cada situación.

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